La misión de Justicia y Paz es promover el desarrollo de los pueblos más pobres y favorecer la justicia social entre las naciones.
Esta misión se encomienda en la Iglesia católica por Pablo VI, en 1967, para estimular a la comunidad cristiana en la realización de una acción conjunta con todas las personas de buena voluntad a fin de abordar los aspectos económicos, sociales, culturales y espirituales de los que depende la felicidad o desgracia de la gran mayoría de los seres humanos en el mundo.
Tiene una visión cristiana del desarrollo, que no se reduce al simple crecimiento económico sino que consiste en la defensa y promoción de los derechos de los pueblos y de todas las personas, en el empeño de que estos derechos no sean solamente reconocidos sino que puedan ser ejercidos y respetados.
A las comisiones de Justicia y Paz se les confía en sus estatutos estudiar y ayudar a difundir la Doctrina Social de la Iglesia que incluye esta misión, visión y valores. Por ello, Justicia y Paz realiza este trabajo, dedicándole una especial atención a la divulgación del mensaje de la Jornada Mundial de la Paz, que se celebra cada primer día de enero.
Identidad
Justicia y Paz es una entidad católica sin fines lucrativos y reconocida como de carácter social, fundada por Pablo
VI en 1967 como fruto del Concilio Vaticano II y animada por su espíritu, que fue constituida en España en 1968 por la
Conferencia Episcopal Española y está extendida por todo el mundo.
Valores
Para llevar a cabo esta misión, relacionada con la difusión de los derechos humanos, se concretan acciones dirigidas a la defensa y promoción de la justicia social y la paz, la solidaridad y el cuidado del medioambiente, el respeto a la libertad, la igualdad y la dignidad inviolable de toda persona humana, desde una opción necesaria y permanente a favor de los más empobrecidos de la tierra.
Esta misión, visión y valores se concretan en la realidad social de cada momento y suponen pilares de reflexión para el camino de los integrantes de las Comisiones de Justicia y Paz.