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Los innumerables conflictos armados existentes, las injustas guerras perpetradas en Afganistán e Irak, la violación de Derechos Humanos amparada bajo la excusa de la persecución del terrorismo internacional, así como la creciente devastación de recursos naturales no renovables, acompañados de contaminación ambiental y pérdida de la biodiversidad, nos decidió a promover una campaña de sensibilización y denuncia de las entidades financieras que participan en industrias militares o que alteran gravemente la vida de comunidades y pueblos, mediante la exigencia de un auténtico respeto de los derechos humanos y el medio ambiente, por parte de las entidades bancarias.
Gracias a la información sobre los intermediarios financieros de las exportaciones de armas que proporciona el gobierno italiano, se supo que el BBVA participaba de manera muy importante en las exportaciones italianas de armas (29,60% en 2002).
El objetivo de la campaña es crear una opinión pública que favorezca un cambio de actitud de las entidades financieras y la Corporación BBVA, en particular, y que de este modo cancelen sus inversiones en las empresas fabricantes de armamento relacionadas y anulen la financiación de empresas altamente contaminantes o que vulneren los derechos humanos.
En 2009 se participó en la Junta General de Accionistas del BBVA.
Las políticas internacionales multilaterales encaminadas a la resolución de los graves problemas de desarrollo que afectan al mundo no son implementadas, debido a la ausencia de la voluntad política y de las fuentes de financiación necesarias. Muy pocas de las expectativas generadas en las Cumbres de los 90 y en la Cumbre del Milenio de Naciones Unidas (Objetivos de Desarrollo del Milenio incluidos) se están cumpliendo. Naciones Unidas no cuenta con la capacidad y posibilidades necesarias en estos temas de desarrollo, que parecen haber sido transferidos al mercado, sobre todo a través de las políticas impulsadas por las Instituciones de Bretton Woods y la Organización Mundial del Comercio.
Frente a esta situación, personas de todo el mundo están empezando a reivindicar su derecho democrático a participar en decisiones que tanto afectan a sus vidas. La Sociedad Civil mundial debe jugar un papel clave en el fomento de la democratización del Sistema de Instituciones Internacionales. En consecuencia, esta campaña plantea impulsar una serie de reformas en las Instituciones Internacionales hacia un sistema de gobernabilidad democrática mundial, a través de procedimientos representativos en los que participen todos los actores. Su objetivo es contribuir a la creación de una arquitectura mundial coherente, transparente, responsable y eficaz; basada en el desarrollo de una legislación internacional ampliamente aceptada por su valor y legitimidad democráticos; que ponga en el centro del Sistema unas Naciones Unidas más fuertes, más democráticas y con un control efectivo sobre todos sus órganos, agencias y sobre las otras organizaciones multilaterales mundiales. Un sistema institucional que contribuya de este modo a la construcción de un mundo más justo, equitativo, diverso, sostenible y pacífico.
La Marcha Mundial comenzó en Nueva Zelanda el 2 de octubre de 2009, día del aniversario del nacimiento de Gandhi y declarado por la Naciones Unidas día Internacional de la No-Violencia. Finalizó en la cordillera de Los Andes, en Punta de Vacas, al pie del Monte Aconcagua el 2 de enero de 2010. Durante estos 93 días, atravesó más de 90 países y 100 ciudades, en los cinco continentes. Cubrió una distancia de 160.000 km por tierra. Algunos tramos se recorrieron por mar y por aire. Pasó por todos los climas y estaciones, desde el verano tórrido de zonas tropicales y el desierto, hasta el invierno siberiano.
¿Por qué se organizó esta marcha?
• Porque el hambre en el mundo puede resolverse con el 10% de lo que se gasta en armamento. ¿Podemos imaginar cómo sería si se destinara el 30 o el 50% para mejorar la vida de la gente, en vez de aplicarlo en destrucción?
• Porque eliminar las guerras y la violencia representa salir definitivamente de la prehistoria humana y dar un paso de gigante en el camino evolutivo de nuestra especie.
• Porque en esta aspiración nos acompaña la fuerza de las voces de cientos de generaciones anteriores, que sufrieron las consecuencias de las guerras, y cuyo eco sigue escuchándose hoy en todos los lugares donde siguen dejando su siniestra estela de muertos, desaparecidos, inválidos, refugiados y desplazados.
• Porque un "mundo sin guerras" es una propuesta que abre el futuro y aspira a concretarse en cada rincón del planeta en el que el diálogo vaya sustituyendo a la violencia.
La Alianza Española contra la Pobreza organiza en torno al 17 de octubre, Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, una semana de sensibilización en torno a los Objetivos de Desarrollo del Milenio, que termina con movilizaciones para recordar a los líderes mundiales su compromiso con la lucha contra la pobreza y sus causas.
Este año, la Semana contra la Pobreza, se ha llevado a cabo del 13 al 18 de octubre. Las manifestaciones con los lemas “Rebélate contra la Pobreza”, “Una promesa no alimenta” se han desarrollado los días 16, 17 y 18 de octubre en todo el país.
La sociedad civil ha dirigido sus reivindicaciones hacia los dirigentes políticos a través de vídeos que llevaban por título “¡Yo exijo!” y que se han proyectado en las distintas movilizaciones de las ciudades.
1.020 millones personas pasan hambre en el mundo, una cifra que nunca antes se había alcanzado. La crisis no puede ser una excusa para acabar con la pobreza; si se pueden reunir 8 billones de dólares para salvar a los bancos, ¿por qué no es posible reunir una centésima parte de esa cifra para luchar contra la pobreza?
En Madrid, la manifestación se realizó el 16 de octubre. Al final de la misma se leyó un comunicado en el que se exigió, con una gran pitada, que se cumplan los compromisos asumidos por los gobiernos para que los Objetivos de Desarrollo del Milenio se cumplan en 2015.
El broche final de la movilización lo puso la canción “El grito de mi generación”, compuesta para la ocasión por miembros de la Sonrisa de Julia, del Canto del Loco, y del Sueño de Morfeo, y la actuación del grupo Poliposeídas.
Con discursos y promesas no se curan enfermedades, ni se crean empleos dignos, ni se garantiza el acceso a la educación.
En la Alianza Española contra la Pobreza sabemos que las promesas no curan, no alimentan y no protegen.
La Coalición contra las Municiones en Racimo (CMC, por sus siglas en inglés) es una coalición internacional que trabaja para proteger a civiles de los efectos de las municiones en racimo promoviendo una adhesión universal y la completa implementación de la Convención sobre Municiones en Racimo. 300 organizaciones de la sociedad civil de más de 80 países ya son miembros de la CMC, ellas incluyen organizaciones que trabajan con el desarme, paz y seguridad, derechos humanos, asistencia a víctimas y sobrevivientes, limpieza, derechos de las mujeres, asuntos religiosos y otras áreas. La CMC facilita a las ONG del mundo esfuerzos para asesorar gobiernos, público y medios sobre los problemas de las municiones en racimo y la solución a través del tratado global que prohíbe dicha arma.
El 3 – 4 de Diciembre del 2008, 94 gobiernos firmaron la Convención sobre Municiones en Racimo en la Conferencia de Firma en Oslo. El tratado recibió firmas en Nueva York. La Convención prohíbe el uso, producción, almacenamiento y transferencia de municiones en racimo y obliga a los países a limpiar las áreas afectadas, asistir a las víctimas y destruir las existencias.
La prioridad de la CMC en el 2009 ha sido realizar una intensiva campaña global de ratificación para asegurar que 30 países ratifican la Convención sin atraso, para poder ponerlo en vigencia y comenzar el proceso de implementación. La CMC también continuará la campaña en los países que aún no han firmado la Convención para alentarlos a que firmen el tratado lo antes posible en las Naciones Unidas en Nueva York.
Participación de Justicia y Paz, a través de la CMC de Barcelona.