CONTENIDO
IDENTIDAD
REDES
PAÍSES
DEL SUR
CAMPAÑAS
DE EPD
FORMACIÓN
OTRAS ACTIVIDADES
INCIDENCIA
POLÍTICA
PUBLICACIONES
DATOS
ECONÓMICOS
RECURSOS
HUMANOS
|
 |
MISIÓN |
|
 |
Medicus Mundi (MM) existe para contribuir a generar cambios en la Sociedad, fomentando una cultura de solidaridad y compromiso ciudadanos, que hagan posible la erradicación de la pobreza y permitan que la salud sea un derecho al alcance de todas las personas
Principios.
1.- El ser humano, tomado individual y socialmente, debe ser el centro del proceso de desarrollo. Por ello, deben evitarse todas aquellas acciones que fomenten la exclusión, la marginación o la discriminación de personas o colectivos sociales, ya sea por razones económicas o políticas, ya estén basadas en criterios de sexo, raza o religión. Más bien al contrario, el desarrollo ha de entenderse como un proceso integrador, que promueve la cohesión social, aminorando las desigualdades que puedan regir en el seno de las sociedades.
2.- El desarrollo ha de entenderse como un proceso de ampliación de las capacidades y opciones de las personas, especialmente de los sectores más vulnerables y empobrecidos. El propósito último es hacer a los pueblos dueños de su futuro de manera creciente, incrementando su autonomía y protagonismo en los procesos de cambio que el desarrollo comporta. Por ello, la cooperación para el desarrollo debe evitar cualquier situación en la que se promueva la dependencia o subordinación de las comunidades del país receptor frente a la acción del donante. Éste debe fundamentar, por el contrario, su acción en el apoyo a los procesos y capacidades locales, desde el respeto a la dignidad y libertad creativa de las personas, persiguiendo una creciente equidad social y de género en un entorno de sostenibilidad medioambiental.
3.- La acción de cooperación para el desarrollo se fundamenta en la obligación, que a todos y todas concierne, de hacer efectivos aquellos derechos, incluido el derecho al desarrollo, que la comunidad internacional ha definido como atributos inviolables del ser humano. Porque el desarrollo se basa en esta concepción de los derechos que asisten a las personas y a los pueblos. De esta manera, la defensa de la salud, en tanto que dimensión básica del derecho a una vida digna, debe constituirse en uno de los fundamentos del desarrollo.
4.- El desarrollo pertenece a cada pueblo, que debe ser destinatario y protagonista de los procesos de cambio. Es a los propios pueblos, en consecuencia, a quienes corresponde definir el modelo y la estrategia de desarrollo que desean; y son esos mismos pueblos quienes deben protagonizar los procesos de cambio a partir de sus recursos y capacidades, con el apoyo y estímulo de la comunidad internacional. En correspondencia, la tarea de Medicus Mundi consiste en apoyar y estimular ese proceso, a partir del compromiso y trabajo compartido con las comunidades afectadas, posibilitando el ejercicio de sus derechos civiles y su participación en el diseño de políticas públicas.
5.- Las acciones de cooperación para el desarrollo constituyen una expresión de solidaridad, de búsqueda de mayores niveles de justicia social y de lucha por la igualdad de derechos de todas las personas, y se convierten en un vehículo para el diálogo intercultural de los pueblos, más allá de su obligado contenido técnico en función de los objetivos que en cada caso se persigan
|
IDENTIDAD |
|
 |
Valores que caracterizan a Medicus Mundi
Participación: La Organización está abierta a la participación de la Sociedad, tanto en el Sur como en el Norte. Participar en sus Asociaciones obliga al trabajo en equipo, a la formación y al debate en búsqueda del consenso. Con los grupos locales de los países en donde trabaja construye relaciones igualitarias de partenariado, basadas en la confianza y el respeto mutuo. Fomenta el fortalecimiento de instituciones y procesos democráticos, tanto en el interior de las asociaciones como en el conjunto de proyectos y acciones.
Independencia: Medicus Mundi no depende de ningún grupo político o económico, ni de ninguna confesión religiosa. Sus acciones se basan en la independencia respecto de instituciones y financiadores. Esta independencia implica un respeto a la diversidad de opiniones, culturas e ideas, fruto de un dialogo fértil y sin prejuicios.
Integridad: La honestidad y la transparencia en principios y métodos guían el trabajo y configuran la credibilidad que construye, día a día, la Organización. Mantener esa actitud supone ejercitar la capacidad de reflexión y autocrítica, compartir ideas e informaciones con las personas socias y colaboradoras y estar abierta a nuevas contribuciones.
Profesionalidad: Entendida como seriedad y rigor en los compromisos y acciones que permiten, desde una especialización profesional y geográfica, dar respuesta a las necesidades de las poblaciones más desfavorecidas, con eficacia, eficiencia y calidad.
Pluralidad: Las relaciones se basan en el respeto a las diferentes posiciones políticas, religiosas y filosóficas. La diversidad de experiencias, culturas y opiniones favorece la búsqueda de alternativas. Así se aprovechan las potencialidades de todos y todas, se favorece que cada cual asuma responsabilidades y se crean oportunidades para facilitar el logro de los objetivos perseguidos.
Solidaridad: Expresión de la necesidad de crear un mundo más justo, en el que una ciudadanía responsable, empeñada en la transformación social, consiga la mejora de las condiciones de vida de las sociedades más empobrecidas y el pleno ejercicio de los derechos de las personas y de los pueblos.
|
|